Desde “Saltado muros” nos comunicamos con Gabriel Salomón, excombatiente de la guerra de Malvinas para que nos cuente sus recuerdos y sensaciones sobre aquel 14 de junio de 1982 vivido en las islas.
“Yo estaba la isla gran Malvina, allí nos bombardeaban permanentemente. De repente paran los bombardeos y le avisan al jefe de regimiento que se iniciaba un cese al fuego y que estaban negociando. Debimos destruir nuestros fusiles, los vehículos y todo material que pueda servirle al enemigo. Es horrible porque tu incertidumbre cada vez crece más, porque vos no sabés qué te va a ocurrir iba a pasar. Todo el 14 estuvimos en vela y el 15 nos avisan finalmente del cese de hostilidades.
Respecto a sus pensamientos sobre el conflicto y su desenlace, precisó: “Yo siempre tengo cuidado en cómo digo las cosas. Para que haya una guerra, debe haber una declaración y no hubo una declaración formal de guerra, entonces lo que hubo en Malvinas fueron acciones bélicas de combate. Por qué marco esta diferencia, porque para la diplomacia, cuando vos declarás una guerra, el vencedor impone condiciones. No es este el caso y de esta manera, Argentina puede seguir reclamando por la soberanía sobre las islas.”
El largo retorno a… ¿casa?
“Nunca volví a ser ese pibe. Estar en una guerra, cualquiera está, pero no cualquiera vuelve. ¿Cómo hacés para volver? Yo hace 38 años que estoy tratando de volver. El pibe lleno de proyecto y sueños que fui nunca volví a serlo. Cuando volví de Malvinas me encontré con que lo que conocía como vida había explotado. Me quedaron jirones de esa vida y tuve que agarrar todos esos retacitos y volver a armar una vida.”
“Cuando estábamos con la trinchera con mis compañeros, hablábamos de lo que haríamos cuando terminara la guerra. Bueno, nada de eso ocurrió. Después tuvimos que empezar a pelear no solo con nuestros fantasmas, sino con los fantasmas de la gente. Pasamos a ser los chicos de la guerra. En algún momento escuché que gente más grande que yo, cuando hablaba de la guerra decía: “¿Cómo querés que ganáramos la guerra con estos pendejos?” Pasamos a ser los ‘loquitos de la guerra’ e insertarse en el mundo laboral era una quimera. Entonces, empezamos a ocultar que estuvimos en Malvinas para conseguir trabajo.”
“Tuvimos que enfrentar los miedos que la gente desarrollo, más el ocultamiento que del gobierno nacional. El ex Canciller Caputo dijo que nosotros (los veteranos) éramos el carro atmosférico de la dictadura. Todo eso hacía que la reinserción en la sociedad fuera cada vez peor. Fue a partir de muchísimo esfuerzo y apoyo familiar que logré reinsertarme en la vida laboral y social, pero siempre me queda ese 15 de junio.
La otra guerra que empezó el 14 de junio del ’82
“El 14 de junio terminaron las acciones bélicas y comenzó la guerra por la recuperación de Malvinas, la recuperación pacífica, la recuperación con la diplomacia, con la política.”
“Ni bien llegamos de Malvinas nos organizamos en centros de veteranos, en primer lugar para reinvindicar a los caídos en combate y ayudar a los sobrevivientes, muchos de los cuales pasaba urgencias económicas.”
“Los veteranos siempre pedimos que el gobierno negocie de pie. Lo que hizo el gobierno anterior, fue otorgarle al usurpador (Inglaterra), todo lo que se le antojó, completando la entrega que ya habíamos sufrido en los noventa, con el tratado de Madrid. El usurpador tiene más derecho y más comodidades. Están depredando nuestras riquezas marítimas y se lo permitimos.”
Hoy el reclamo por la soberanía continúa: “Venimos reclamando a los distintos gobiernos una política de estado que nos conduzca a la recuperación de Malvinas. Que tengamos una política firme, si vamos a negociar, lo hagamos de pie y no arrodillados, aceptando de forma genuflexa todo lo que nos vengan a imponer.”