Nos comunicamos con Gina Caporale, delegada de CTA autónoma de la zona Rawson-Trelew y trabajadora del INPAT (Instituto de Neurociencias Patagónico) ya que los trabajadores del Instituto están en conflicto con el directorio de la obra social provincial, SEROS, que planea flexibilizar sus condiciones laborales y empujarlos fuera del sistema.
La situación se agravó, además porque desde el INPAT denuncian que Jorge Vecchio es al mismo tiempo vocal del directorio por el estado y socio de una empresa que presta servicios a SEROS.
El conflicto está estancada dado que la Obra Social está ignorando las acciones de los trabajadores del INPAT, cuyos puestos de trabajo están en peligro por la flexibilización laboral que impulsa el directorio de SEROS: Buscan precarizar el servicio y dejar afiliados sin acceso a servicios de salud mental para reducir costos para la obra social. Los pacientes que atiende el INPAT son en general adultos mayores y personas con patologías de salud mental.
Los empleados de SEROS fueron los primeros en advertir las irregularidades, pero no podían denunciarlo sin perder sus trabajos, por lo que fueron los trabajadores de INPAT quienes llevaron el caso a la justicia. Ante esto, la denuncia busca forzar al directorio de SEROS a que dé explicaciones sobre las irregularidades y las razones de la precarización.
Por parte de SEROS habían tenido una corta serie de reuniones donde no recibieron ningún tipo de respuestas, y donde el director de la obra social les aseguró que no iban a quedar sin trabajo y les propuso que “De última, hagan una cooperativa. Nosotros los vamos a recomendar”. Ante la insistencia de los trabajadores, sin embargo, la única respuesta fueron intentos de intimidación y amenazas. “Me dijeron que ‘no sabía con quién me estaba metiendo’. Era un comentario hacia mí. No estoy acostumbrada a que me amenacen y no atiné a grabar” afirma la delegada de CTA.