Trabajadores de la pesquera FYRSA (ex foderami) en Trelew están reclamando por sus salarios atrasados y por la regularización de 90 trabajadores que hoy en día siguen en negro a pesar de un acuerdo firmado en 2018. Aunque el 3 de Junio se dictara la conciliación obligatoria y se desalojaran las tomas en la planta de Fyrsa en Rawson se mantuvo una guardia mínima que acampa en la vereda de la Ex Foderami que a día de hoy sigue parada.
157 de los 189 trabajadores han firmado un acuerdo, presionados e intimidados por la empresa, que habla de parte de la deuda, pero que les quita el derecho de reclamar la otra parte. “Se aprovechan de la necesidad de la gente, llamándolos a cualquier horario, cualquier día, intimándolos para que vallan a firmar y recibir esa parte de la deuda; pensando que cuando se resolviera eso podrían volver a trabajar y renegociar la deuda. Después nos aclaró el abogado en la conciliación obligatoria que después de firmar no hay ningún tipo de reclamo con el resto de la deuda”.
Este arreglo establece que se pagarán 36.000 pesos en cuotas, de una deuda que supera los 100.000 pesos. “Fueron presionados por la urgencia de pagar un alquiler, una cuota alimentaria, alguna de las deudas” explicaba Cristina.
El reclamo es además por 90 trabajadores no registrados y con mucha antigüedad que están buscando quedar efectivos en la empresa, como ya se había firmado en un acuerdo del 7 de noviembre de 2018 ante la Secretaría de Trabajo. En la conciliación sin embargo se registraron varias contradicciones, dado que la empresa dice no reconocer su deuda y sin embargo asumió el compromiso de pagar una parte de esta, así como dice no tener empleados no registrados pero se comprometió a incorporarlos frente a la Secretaría de Trabajo. Por el momento, la Secretaría de Trabajo tampoco ha tomado ninguna acción para asegurar que se cumpliera el acuerdo.
Las medidas de fuerza son apoyadas por todos los trabajadores. “El martes tenemos otra audiencia de conciliación, pero sin un punto de acuerdo la conciliación se va a caer” afirmaba Cecilia, una trabajadora de la planta que agrega que deben negociar con la apoderada de la empresa que no puede tomar decisiones y con el abogado que sólo se comunica con ellos de forma telefónica.
La empresa por su parte quería comenzar a operar de nuevo el 18 de Junio con el ingreso de un barco, pero con los nuevos casos de marineros infectados no es probable que vuelvan a las actividades. Por otro lado, y por fuera de la conciliación, el día 15 se cumple otra quincena que debería ser abonada el día 20.
Sobre la acampada, los trabajadores necesitan Nylon y leña, se les han mojado los colchones y frazadas y están aguantando gracias a la colaboración de la comunidad. “Somos muchas familias que dependemos de esto, tenemos compañeros con problemas de salud, que han quedado mal por algún accidente y estamos sin ART, sin obra social”.